La claridad – Marcelo Luján

Título: La claridad.
Autor: Marcelo Luján.
Editorial: Páginas de espuma (1ª ed., julio de 2020).
Género y temática: cuentos; inquietante; drama.
Fecha de fin de lectura: 12 de abril de 2023.
Lista de reproducción en Spotify

La claridad, de Marcelo Luján, en un árbol con flores. PrimaveraLa claridad fue la obra ganadora del VI Premio Internacional de Narrativa Breve Ribera del Duero. Cinco relatos inquietantes donde la claridad brilla por su ausencia, más un sexto (“Más oscuro que tu luz”) añadido para la publicación de la obra y ganador del XXXV Premio Villa de Mazarrón. Voy a comentar los cinco primeros como un todo y el sexto de manera independiente al final porque no tienen nada que ver y, de hecho, esta es una de las pegas que le pongo a este título.

No es el tipo de literatura que suelo escoger, pero llegó a mí por ser el título de una de las sesiones del club de lectura al que asisto y nada más empezar a leer ya vi que, independientemente del género, aquello pintaba bien.

El estilo de los cinco primeros cuentos es similar y, si leemos atentas, podemos descubrir las conexiones entre ellos. El autor dosifica la información poco a poco, advierte que algo va a pasar sin llegar a decirnos el qué para aumentar la tensión. Esto puede llegar a ser cansino, cuestión de gustos, pero quizás porque es un libro corto, lo acepté sin problemas y me gustó, aunque me crispó. Provocar desasosiego probablemente era la intención del autor.

En cuanto a los temas que trata, son los que nos preocupan, al menos en occidente: la violencia de género, las relaciones paternofiliales, la economía familiar, la independencia, el amor, echar un polvo. Para acercarse a ellos utiliza recursos tradicionales como las creencias religiosas y la superstición o los fantasmas, de manera que casi todas las historias tienen un componente místico, casi casi de realismo mágico en ocasiones. Se trata pues, de historias oscuras tanto por género como por temática, llenas de violencia y sangre. La sangre no puede faltar mientras que la claridad, símbolo de pureza, paz y conocimiento, está casi siempre ausente.

Sólo las lectoras sabemos de antemano que va a pasar algo y conocemos a los personajes que rodean a los protagonistas, ellos viven en la inopia hasta que el drama se les presenta delante de la nariz. Muchos también desconocen cómo son en realidad las personas con las que se relacionan, aunque se trate de sus padres o sus hermanas, de esta manera son carne de manipulación y un coladero de las mentiras ajenas. Siempre hay una barrera que les impide ver la verdad, que impide que la claridad llegue a ellos.

Ahora toca lo negativo, lo que hace que no sea magistral para mí. Lo primero, el primer cuento, “Treinta monedas de carne”. Presenta una violación tan desagradable que no pude seguir leyendo, da la sensación de que se buscaba el morbo. Sigue el mismo patrón que la de Coleman, como si Gilaberte se hubiera inspirado en Luján. La escena se estaba alargando demasiado y tuve que dejarla. Luego leí unas cuantas oraciones por aquí y por allá y supe el por qué del título y el final. Suficiente. Me parece que es un cuento fantástico, con mucho para comentar, al que le dedicamos tanto tiempo en el club como a todos los demás juntos, pero no tengo necesidad de estas cosas. Eso sí, después de éste, los demás casi son un paseo.

El segundo punto negativo, el papel de las mujeres. De las que tienen cierto peso en la trama, sólo se salvan la angelical Astrid de “Treinta monedas de carne” y la chica rubia de “La chica de la banda de folk”, también angelical. El resto son despreciables, problemáticas, malas, mientras que ellos, dejando de lado a los violadores, son bastante pasivos, anodinos, puedes llamarles idiotas, pero no generan el rechazo que provocan ellas aun siendo víctimas.

El tercer punto, el último cuento, “Más oscuro que tu luz”. Me gustó muchísimo, pero se nota que no tiene relación con los demás. Si el elemento de unión entre todos fuera la claridad, pero no hubiera conexión en el estilo, no habría problema. Pero los cinco primeros están conectados estilísticamente y además tienen unos elementos internos que los unen y los hacen formar un solo elemento.

“Más oscuro que tu luz” es brillante, con un chorro de luz del mediodía siendo primero peligro y seguridad después. Aunque la sangre está presente igual que en los otros no es tan duro, más bien triste, y no es oscuro temáticamente aunque tenga un punto inquietante. Lo he visto muy intimista, quizás por tratar el tema del duelo.

A pesar de estar incluido este último relato a mayores, mi problema es el primero. Creo que sería una colección de relatos fantástica sin él. Con él también lo es, pero para mí un poco menos y puede herir sensibilidades.

Autor: cocodras

Lectora. Bookcrosser.

Deja un comentario

Diseña un sitio como este con WordPress.com
Comenzar